Respecto al post pasado, Ramiro escribió:
"Primero oración; después mortificación; en tercer lugar, muy en tercer lugar, acción. Es tiempo de orar"
Creo que sí es el orden correcto:
1. oración
2. mortificación
3. acción
Con esto en mente, hagamos un poco de aritmética cristiana:
1+2-3= santurronería
1-2-3= hipocrecía
2-1-3= sadismo (o fariseísmo, siendo un poco optimistas)
2+3-1 = legalismo
3-1-2= filantropía
1+2+3= santificación (cristianismo auténtico)
2 comentarios:
Bastante interesante..
Lo que puse lo escribió San Josemaría , y se me hacen palabras muy sabias dignas de un santo.
Me impresiona como choca con nuestro esquema actual de evangelización. Queremos de inmediato ponernos a trabajar reclutando gente, haciendo retiros, misiones, etc. pero muy pocas veces nos preparamos espiritualmente para tener nosotros esa gracia que se necesita y a la vez para que por medio de la oración y la mortificación los corazones de los evangelizados sean ablandados. Siento que siguiendo esa sencilla fórmula podemos llegar más lejos y sobre todo a más corazones que tanto lo necesitan.
Es tiempo de dejarnos de niñerías y empezar a santificarnos de verdad. Verdaderamente ser dignos de llevar el nombre de cristianos.
Chin, ya había escrito todo bien inspirado, a ver si me vuelve a salir.
No comparto mucho la idea de
1. oración
2. mortificación
3. acción
Ahí va el por qué de mi diferente modo de pensar al respecto.
Voy a utilizar un ejemplo: vamos a decir que yo tengo un hermano que se droga. Eso, obviamente, no me gusta a mí y quiero ayudarlo, pero cómo ayudarla?
Decido hacer oración por el. Serviría de ayuda mi oración? o sería en vano que yo orara? Pienso que sí serviría mi oración, que mi oración sería una gran ayuda para mi hermano. Si, entonces, mi oración fue la manera de ayudar y ayudar es una manera de actuar, no se habría convertido mi oración en una acción? Viendo que una acción es una forma de hacer algo por otro, si estoy haciendo oración por mi hermano, no estoy ya HACIENDO algo, lo cual constituye una forma de actuar?
Con esto trato de demostrar como una oración se puede convertir en una acción.
Pero igualmente puede una acción convertirse en una oración.
Volviendo al ejemplo, si ahora, en lugar de hacer propiamente una oración a solas en mi cuarto entre Dios y yo, decido mejor platicar con el, decirle que lo que hace no está bien, que busque a Cristo, etc, etc, ý el en realidad encontrara a Cristo en mí y yo descubriera a Cristo en su necesidad, no se habría convertido mi ayuda, mi acción en una oración? En la inteligencia que una oración es una conversasión, diálogo, monólogo, comunicación con Dios. Si yo, actúo para con él con amor, si lo hago para rendir gloria a Dios y para ayudar a mi prójimo, mi acción no se habría convertido en una oración? Toda vez, que a través de mi hermano y mi hermano a traves de mí, hemos podido descubrir a Dios y dejar que él nos ayude y nos comunique lo que necesitamos para mejorar en nuestras vidas.
A lo que voy es: pienso que una oración puede convertirse en acción y una acción puede convertirse en una oración. Pueden ambos llegar a ser uno mismo, y creo que cuando se fusionan, podríamos llamar a esa fusión "AMOR"
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